Habéis tenido alguna vez la sensación al llegar a casa de pensar…»Hoy me apetece…tal o cual cosa muchiiiisiiimooooo»???.Pues es justo lo que me pasó a mi el otro día por la noche al abrir la nevera y ver en el fondo un Tupper que tenia olvidado con los restos de un lomo de Bacalao desalado, cortado en finas laminas y conservado en aceite, MMMMMMMM, y pensé que había que darle salida rápidamente. Me apetecía tomarme una tortilla como dios manda así que batí un par de huevos de corral con una gotita de Soja y otra de Mirim, le añadí el bacalao en aceite escurrido y 2 corazones de cebolla pochada de la que siempre tenemos en el congelador y a la sartén, y con todos ustedes… la Tortilla de Bacalao y cebolla pochada.
Mirad que pinta tan rica… Me tocó protegerla de los pequeños pero constantes ataques que Berta le hacía cuando me despistaba…
Saludines,
Dule